El cáncer es una enfermedad compleja que afecta a millones de personas en todo el mundo. Aunque la quimioterapia ha sido uno de los tratamientos más utilizados para combatir el cáncer, hay muchas otras opciones terapéuticas disponibles que no implican la administración de productos químicos. Algunas de las más comunes son:

La tanatología es una rama de la psicología que se enfoca en el estudio de la muerte, el proceso de morir y el duelo que sigue a la pérdida de un ser querido. Aunque es un tema que a menudo se evita y se considera tabú en muchas culturas, la tanatología es una disciplina importante y útil que puede ayudar a las personas a entender y manejar el final de la vida.

Los cuidados paliativos son una forma de atención médica que se enfoca en mejorar la calidad de vida de los pacientes que padecen enfermedades graves, incurables o que limitan la vida. Estos cuidados buscan aliviar el dolor y otros síntomas del paciente, brindándole confort y apoyo emocional.

La detección oportuna del cáncer es uno de los temas más importantes en la medicina actual. El cáncer puede afectar a cualquier persona y es una enfermedad que puede tener consecuencias graves si no se detecta a tiempo. La detección oportuna es una parte esencial de la prevención y el tratamiento del cáncer, ya que permite salvar vidas.

El dolor por cáncer puede ser una de las experiencias más dolorosas que una persona puede experimentar. La buena noticia es que hay muchas opciones de tratamiento disponibles para ayudar a aliviarlo, desde medicamentos hasta terapias complementarias.

La anemia es un trastorno de la salud causado por una falta de glóbulos rojos o de hierro en la sangre. La anemia también puede ser causada por una variedad de trastornos médicos, incluyendo deficiencia de vitaminas, enfermedades crónicas, trastornos de la sangre, enfermedades del hígado y problemas renales. En algunos casos, la anemia también se puede producir como resultado de la pérdida de sangre.